La pequeña no ha podido superar su enfermedad. Su hermandad, la Hermandad de los Estudiantes, se había volcado durante estos meses con la intención de recaudar fondos para ayudar a la familia de la niña económicamente en el desplazamiento a Estados Unidos para tratar allí su enfermandad, con la campaña solidaria "Hermandad por la Vida".
Al final Dios tenía otros planes para la pequeña. Siendo el que escribe padre de familia, se me parte el alma al tener que informar de esto. Ruego a Dios por el eterno descanso de Almudena y para que no abandone a sus padres, familiares y amigos que en estos duros momentos no tendrán consuelo.
Seguro que Almudena ya estará gozando de la presencia de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia, al que habrá sido llevada de la mano de María Santísima de la Esperanza.
Descansa en paz , Almudena.
