Una vez finalizado el triduo en su honor en San Tirso el Real, Nuestra Señora de la Esperanza regresó a su Capilla en la Plaza de la Catedral de Oviedo.
Como manda la tradición secular a la conclusión de la Santa Misa y con la imagen de la Esperanza de Oviedo sobre los hombros de sus anderos se rezó el responso ante la tumba de doña Velasquita Guiraldez en el interior de San Tirso. Insigne dama ovetense que en 1232 propicia la fundación de un hospital para donarselo a la Cofradía tal y como recuerda hoy la cronista oficial de Oviedo en el diario La Nueva España.
La imagen fue llevada de nuevo a su Capilla donde estos días permanecerá expuesta al culto de forma permanente hasta que el próximo martes, Martes del Campo en Oviedo festividad local, se celebren de nuevo cultos en su honor , en esta ocasión en su Capilla con el reparto del pan bendito por la mañana y la ofrenda de velas durante todo el día.
En la Misa y posterior Procesión estuvieron presentes todas las cofradías penitenciales de Oviedo arropando a la Decana de las cofradías de Oviedo con excepción de la Hermandad de Los Estudiantes. Los representantes de estas penitenciales, entre los que se encontraban tres hermanos mayores de cofradías de Oviedo, procesionaron tras la imagen de la Esperanza de Oviedo acompañando a los responsables de la Antigua Cofradía de Nuestra Señora de la Esperanza de Oviedo.
Esperemos que el año próximo esta Procesión se aproxime a lo que en años pretéritos fue esta importante cita de la iglesia asturiana en vísperas de la Solemnidad de Pentecostés, como recuerda este cartel de Cultos de 1950 que la Cofradía de la Esperanza de Oviedo guarda en sus oficinas.
Donde, aparte del nombre que aun algunos ponen en duda de Cofradía de Nuestra Señora de la Esperanza, podemos ver la importancia de los Cultos y el recorrido de la procesión de vuelta: Rua, Cimadevilla, Fruela y San Francisco para llegar a la Capilla finalmente